La voz

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Un tesoro maravilloso y más aún cuando viene educada y bien utilizada. No es simplemente una vibración mecánica y desprovista de esencia; es el vehículo que porta en sì la energía del pensamiento. Su poder se fundamenta en el efecto que produce; a través de la voz podemos generar todo tipo de sentimientos, desde los más nobles hasta los más obscuros, con ella podemos herir o sanar, podemos enamorar, inspirar, estimular, abrir puertas, mover montañas, y también destruir, aniquilar, devastar. No en vano fue la herramienta que se empleó para  la creación de todo lo conocido y lo ignoto y es un privilegio solo de la raza humana, al menos en este planeta. Por esto y muchas razones más, el manejo correcto de la voz reviste una importancia de primer orden, pues todo el que desea comunicar, independientemente del oficio que desempeñe, debe saber usar este don.

Sin embargo hay algo que se debe entender. La voz necesita un propulsor, un elemento que le brinda impacto, color, textura, forma y sobre todo credibilidad. Independientemente del tipo de voz que se posea, de su timbre, de su profundidad, de su tesitura, lo que hace que una voz cumpla con el objetivo deseado por su emitente es el sentimiento. Sin una emoción que de vida a la voz, esta se percibe vacua y poco creíble, es el mismo efecto que producen algunos actores al momento de decir sus parlamentos desprovistos de alma, de sentimiento. Suena falso.

Otro elemento que es sumamente importante es la técnica, saber hablar no basta, casi todos lo hacemos, sin embargo, hablar en público, delante de un micrófono, o en una conversación de negocios, intima o en una obra de teatro, requiere distintos modos de abordar la emisión de la voz. Resulta evidente que conocer las técnicas de respiración, entonación y proyección de nuestra voz, además de las normas relativas a la escritura del idioma empleado (recordemos que gran parte de lo que decimos lo hemos primero leído), es una condición sine qua non para transmitir de manera efectiva el mensaje que se desea.

Así que si decidiste conocer un poco más sobre  este único e inapreciable recurso, estás en el lugar correcto.